Me llamo Beatriz y la historia de mi vida comenzó el 15 de enero de 2003, hace trece años.

   

    Soy muy alta, me suelen decir que dentro de poco voy a pasar a mi hermana mayor de dieciséis años. Mi pelo es marrón muy oscuro, siempre lo confunden con negro. Mis ojos son marrón claro, puede que sea porque mi padre los tiene negros y mi madre azules. En mi boca tengo unos amiguitos metálicos que no me caen muy bien pero estarán conmigo hasta septiembre. Mi pelo no es largo, pero no es corto, pero sí es liso, pero solo porque me lo plancho. Me gusta llevar el pelo suelto, si no me da la sensación de estar calva y eso no me es agradable.

 

    Soy capricornio, igual por eso me gustan las cabras, me parecen graciosas. Siempre recordaré mi trece cumpleaños, fue uno de los mejores días de mi vida porque me lo pasé genial con mis amigas y familia. También tengo recuerdos borrosos que son buenos y malos, como por ejemplo una boda que no recuerdo de quién era pero me lo pasé muy bien bailando con mi padre y también muy mal cayéndome rodando y haciéndome una herida en la pierna.

   Me gustan muchas cosas como leer, me encanta leer libros en los que aparezcan llameantes dragones, hermosos unicornios, sabios magos, malvadas brujas, graciosos elfos, pequeños enanos, encantadoras hadas… También me encanta cocinar, sobre todo la repostería, y tengo que admitir que se me da muy bien. Me gusta mucho quedar con mis amigas, que es normal que podamos acabar empapadas sin recordar el motivo. Me gusta dormir, pocas cosas aparte del colegio me levantan de la cama, solo cuando por ejemplo vamos de viaje, si vamos a comprarme algo que me hace mucha ilusión, o a coger algún libro pronto de la biblioteca para que nadie me lo quiete. Me gusta ver

la tele aunque por desgracia entre semana no tengo tiempo pero merece la pena ya que el fin de semana podemos disfrutar a la noche de una buena peli acompañada de un delicioso plato de pizza. Hay mucha comida que me gusta incluyendo alguna fruta (hay que comer sano). La comida que más me gusta puede que sean los macarrones, ¡me encantan!. Solemos comerlos un día a la semana y si mi madre no los hace suelo enfadarme con ella (puedo llegar a tener muy mal genio). La fruta que más me gusta sin pensármelo dos veces son las cerezas que aunque a mi hermana le den asco porque tienen un hueso dentro que hay que escupir, a mí su sabor me enamora. Me encantan los deportes de riesgo, no les tengo nada de miedo, ni siquiera a saltar al río desde barrancos de más de ocho metros de altura sin ninguna protección, que ya lo he hecho, ni a salir haciendo la croqueta de una cueva llena de barro, que también lo he hecho, tampoco de caerme de una barca a aguas heladas haciendo rafting, que desgraciadamente, también me ha pasado.